Por: Jesús Díaz
Luego de la conclusión de los informes
municipales en el estado de Quintana Roo, la efervescencia política entre los
grillos del patio entró de nuevo en ebullición ante la cercanía de las
elecciones intermedias, en la que los quintanarroenses habrán de elegir 10 presidentes municipales, Regidores y 25
diputaciones para el periodo 2013-2016.
Al interior de los Partidos Políticos, PRI, PAN, PRD, PANAL, PT Y PVEM, se libran grandes batallas entre los grupos alternos, donde
simpatizantes realizan amarres en lo oscurito para proyectar a sus candidatos
al ruedo político para entrar de lleno a la competencia electoral.
El Caldero Político en Quintana Roo entró
en fase de ebullición tras la conclusión de los informes tanto del Gobernador
del estado, Roberto Borge Angulo,
que rindió buenas cuentas al pueblo a pesar de los problemas económicos por los
que atraviesa el país, y los diez presidentes municipales que libraron a duras
penas este primer año de trabajo municipal, pero con la promesa de que en el
siguiente periodo de su administración redoblarán esfuerzos para entregar
buenas cuentas a sus gobernados.
Los grupos políticos se reúnen en privado
para realizar alianzas que les puedan permitir proyectar un candidato a modo
que pueda competir en las elecciones del 2013, por lo que amarran navajas bajo la
mesa de debates en espera de que sus “gallos” sean los ungidos.
Como sucede en cada proceso electivo,
estos grupos afines a los Partidos Políticos buscan como siempre su modus
vivendi, y no velan por los intereses del pueblo quien al final de cuentas es
el que vota por los candidatos del partido no del pueblo.
Es por esta razón que en estos institutos
políticos los grupos no llegan a acuerdos y comienzan los dimes y diretes, a
grado tal que proyectan a los candidatos de la cúpula partidista que tiene
secuestrado a los partidos, con un final desastroso, ya que no votan por ellos
en las urnas electorales en el día de las votaciones, sino que lo hacen por los
candidatos de otros Partidos Políticos que presentan un proyecto de trabajo
definido.
Los
líderes de cada Partido Político lo saben cómo también saben que si no
proyectan a un candidato a modo para que el pueblo vote por ellos, nunca podrán
salir adelante en cada proceso electoral y seguirán perdiendo fuerza política
como sucede con los “partidos
patitos” que se cuelgan de los
partidos que de alguna manera tienen presencia en Quintana Roo.
En este proceso electoral que se avecina,
los partidos minoritarios están a prueba de fuego para enmendar sus errores y
poder proyectar a un candidato del pueblo, de lo contrario irán desapareciendo
por falta de credibilidad de sus líderes que solo buscan el poder para velar
por sus intereses económicos, no de partido.
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