Por: Jesús Díaz
En los diferentes institutos políticos que
buscan su participación en el proceso electoral a realizarse el próximo año en
Quintana Roo, hay cuadros muy valiosos de jóvenes políticos que bien, merecen
una oportunidad para poder participar en la contienda que se avecina.
Sin embargo, la falta de táctica política
de los dirigentes de estos Partidos y las pugnas que se libran al interior
entre los mismos actores que buscan sus intereses personales y económicos, no
dan paso a estas nuevas generaciones de jóvenes políticos que vienen realizando
un verdadero trabajo partidista entre la militancia que ve en ellos a las
personas idóneas para que los representen en la presidencia municipal y en el
poder legislativo.
Esta falta de proyección futurista no les
permite a los políticos de la vieja guardia ver más allá de sus narices, y
proyectar a un “candidato” a modo, que simpatice con la
militancia de su partido.
Estos grupos anteponen sus intereses personales
que la de su partido, ya que prefieren proyectar a un candidato que vele por
los intereses de grupo que uno que simpatice con el electorado y gane la
contienda.
Tanto el PRI como el PAN, PRD, PVEM, PT y el PANAL, han cambiado de mentalidad y a
la vez comprobado que cuando lanzan a la campaña electoral a un individuo que
simpatice con la sociedad, las batallas políticas se ganan limpiamente en las
urnas electorales y las impugnaciones no tienen cabida en un proceso
transparente, porque el pueblo ya decidió a sus autoridades.
Como ejemplo, tenemos las pasadas
elecciones estatales donde la oposición lanzó al ruedo electoral a sus
candidatos luego de una selección partidista, y donde el triunfo de la
oposición sobre el tricolor en cinco municipios, más dos que estuvieron a punto
de perderse, dejó en claro que no están de acuerdo con la imposición de
candidatos.
La misma dosis se la recetó de nuevo el
pueblo al PRI en las elecciones
federales del 01 de Julio pasado, dándoles a los candidatos opositores el
triunfo en las urnas electorales.
Por tanto, en las elecciones del próximo
año, el PRI podría perder en los
mismos municipios donde gobierna la oposición, tales son: Felipe Carrillo Puerto, José
María Morelos, Benito Juárez, Isla mujeres y Lázaro
Cárdenas, y dos municipios más que podrían pasar a la oposición como Tulúm y Othón P. Blanco, si el PRI-Gobierno
no se pone las pilas y pone a chambear a los funcionarios para sacar adelante
el proyecto borgista.
De esto, cuenta ya se dio el gobernante
estatal, Roberto Borge Angulo, quien
desde que terminaron las elecciones federales se dio a la tarea de recorrer los
municipios y ponerse a chambear en las diferentes obras públicas y sociales a
los que se comprometió a realizar desde que asumió el poder en abril del 2011.
El PRI
lo sabe como también sabe que cuenta con la mejor infraestructura política y con los mejores cuadros partidistas para
hacer un buen papel en las elecciones intermedias del próximo año, pero no lo
logrará si se equivoca como en tras ocasiones al momento de elegir a los
candidatos que participarán en la contienda electoral y donde la oposición vienen
arrastrando con fuerza y dispuestos a no ceder el terreno que ganaron en las
elecciones pasadas.
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